Con el propósito de disminuir la tasa de morbilidad y aumentar la tasa de curación de pacientes con cáncer de mama, un grupo de especialistas del Hospital Universitario (HU) de Nuevo León, México, trabajan en la elaboración de una biopsia líquida no invasiva, que busca la detección temprana y el conocimiento a detalle de las características de este tipo de enfermedad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama es uno de los que más afectan a las mujeres de 20 a 59 años en todo el mundo. En México, se reportan 14,000 nuevos casos de cáncer de mama al año y se estima que el 90% de las pacientes diagnosticadas se encuentran en una etapa tardía, lo que dificulta el control de esta enfermedad. Asimismo, más de 5,000 mujeres mueren por esta causa al año.
Por ello, David Hernández Barajas, jefe del Servicio de Oncología de la institución, anotó que en un promedio de 10 años la mamografía será reemplazada por este nuevo método, el cual podrá ser detectado con una muestra de sangre o saliva, que también mostrará la etapa inicial del tumor.
“Los métodos tradicionales, como los estudios de imagen sólo muestran la fase inicial del tumor cuando se presenta de medio centímetro, mientras que este nuevo procedimiento puede detectar dichas lesiones antes de que se manifiesten”, comentó Hernández.
Para el investigador, la biopsia líquida detecta las células cancerígenas en la sangre, las cuales son las encargadas de producir el tumor en el lugar donde las mismas se reproducen.
Estos estudios llevados a cabo, actualmente están en proceso de realización en el Hospital Universitario, por lo que todavía no llegan a conclusiones finales.
“La perspectiva es eso: que el diagnóstico se haga en una biopsia líquida y la quimioterapia tal vez vaya a desaparecer con tratamientos muy específicos, que van a tratar mutaciones o alteraciones específicas en el ADN”, refirió el experto.