La filial Amazon Games Studio está desarrollando 3 nuevos videojuegos, con los que el coloso tecnológico espera competir en este lucrativo segmento. Esta organización aspira ser un competidor importante en este mercado.
Si bien hasta ahora los usuarios compran las consolas y adquieren los títulos en la plataforma de ecommerce, la compañía aspira obtener una porción más amplia del mercado al ofrecer contenidos propios y servicios distintivos para atraer y fidelizar a la comunidad de jugadores.
El enfoque para competir en este segmento del PC es el de multijugador. Los títulos que desarrolla son: Breakaway, sigue el estilo de un partido de fútbol americano, con combate por equipos 4v4 para transportar una reliquia, sin perder el control sobre ella, entre portería y portería. New World, en el que se combate contra otras civilizaciones o bien se une a ellas, esté título es multijugador masivo, y por último, Crucible, este shooter está ambientado en un futuro apocalíptico y enfrenta a 2 equipos, cada uno de seis jugadores.
El enfoque multijugador desarrollado por Amazon Games Studio pretende explotar al máximo las capacidades de su plataforma de videojuegos online llamada Twitch, que costó 735 millones de euros en el año 2014 y fue creada por Justin Kan y Emmet Shear. Esta plataforma cuenta con casi 2 millones de jugadores emitiendo por día y alrededor de 10 millones de visitantes y permite a la comunidad de gamers retrasmitir sus juegos a través de la red.
Amazon ha diseñado algunas estrategias de promoción para atraer a los gamers entre ellas están: 2 euros como rebaja sobre la suscripción que actualmente es de 19,99, vigente desde el 1 de octubre de este año, para los clientes premium que realicen compras de títulos durante la preventa o hasta 2 semanas después del lanzamiento, esto siempre y cuando el cliente compre un título físico a través de la plataforma de Amazon.
Además de Amazon se vislumbra otro competidor para Steam y Microsoft que dominan actualmente el mercado de juegos para PC. Este nuevo participante será Facebook, que también tiene sus ojos puestos en el lucrativo negocio de los videojuegos, y lo hará mediante una plataforma propia, aspirando a ganar mercado en la medida que incremente el uso de realidad virtual y de sus gafas Oculus Rift.